Como Realizar un Acodo
El acodo Es un método sencillo de multiplicación vegetativa que consiste en conseguir que se desarrollen raíces en un tallo de la planta. Es como la preparación de esquejes de tallo, que se cortan y se ponen a enraizar; el acodo es al revés, el tallo no se separa de la planta madre hasta después de formadas las raíces. El mes de noviembre es propicio en argentina, primavera-verano. No se debe hacer en pleno verano ni en invierno, son períodos de inactividad. Hay que hacerlos con la planta en plena actividad, circulando savia.
Acodo: Hay dos tipos de acodo, el simple y el aéreo, ambos son apropiados para la multiplicación. Conviene realizar una poda suave en las ramas o tallos que se va a acodar.
Acodo simple Conviene realizarlo hacia el final del invierno, una porción de rama de la planta madre se entierra en el sustrato añadiendole turba y arena para favorecer el grado de humedad hasta que suelta raíces. Conviene elegir una rama joven en crecimiento; se prepara limpiándo de hojas y brotes laterales salvo en su extremo. El siguiente paso es doblarla más o menos perpendicularmente hasta el suelo, dónde se cavará un hueco de unos 15 cm de profundidad para meter la rama dejando fuera su extremo superior; la rama se fija al fondo con una horquilla de alambre y se rellena el hueco con tierra apretando bien con las manos. Hay mantenerla húmeda.
El tiempo necesario para que se formen las raíces puede variar, normalmente pasan varios meses antes de que esto suceda, así que hay que esperar al otoño para separar el acodo de la planta madre cortandolo. El acodo está listo para ser una planta independiente, pero si antes de trasplantarlo se lo deja asentar unas semanas será mejor para que comience a desarrollarse.
El acodo aéreo Conviene realizarlo en primavera, las raíces se forman en el tallo de la planta madre sin enterrarlo. Se selecciona un tallo maduro en buen estado al que se despoja de hojas y tallos laterales en su parte superior dejando intacto el extremo. Para facilitar la aparición de raíces hay descortezar el tallo, se trata de raspar la corteza formando un anillo de un centimetro con la ayuda de un cutter, solo hasta que veamos la superficie verde, no marcar un corte con la cuchilla porque nos pasariamos sino raspar con cuidado hasta que aparece la superficie verde prolijamente, después se espolvorea con hormona de enraizar.Las condiciones necesarias para completar el proceso son oscuridad, humedad y buena aireación, así que hay que cubrir la zona ‘pelada’ el musgo es lo ideal pero si no se tiene a mano, vermiculita o arena también sirve. Se toma una bola de musgo húmedo y se compacta un poco entre las manos y se abre en dos mitades,rodear bien el tallo sobre el lugar en el que se descortezó. Luego cubrir con un plástico atando bien los extremos. Transcurridos unos meses las raíces habrán desarrollado y el acodo puede separarse de la plante madre, se retira el envoltorio igual que con un esqueje enraizado, hay que plantarlo en una maceta de tamaño acorde con el de las raíces y dejarlo en un lugar cálido y protegido.
Otro modo es Cuando tenemos un tronco que no es interesante y elegimos acodar la parte superior, primero engrosamos ese sector para obtener conicidad, anillando para engrosar el tronco,colocamos un alambre grueso bien ajustado, cuando logramos el engrosamiento quitamos el alambre, pelamos la corteza hasta obtener un anillo de un centimetro observemos que sea verde toda la superficie no pasarse, con una porcion de un pan de arcilla para floristeria, diluimos agua y arcilla poca cantidad y lo mezclamos con hormona enraizante, pincelamos ese anillo que pelamos con esto y luego armamos una porcion de arcilla con agua amasandola hasta hacerla maleable y rodeamos todo el centimetro que pincelamos antes con esto, luego lo rodeamos con musgo spagnum, ponemos un alambre grueso debajo del anillo rodeandolo a la altura de la base para que sea asiento de un recipiente de telgopor de esos de helado, al que habremos hecho los orificios para drenaje, luego cortamos el telgopor por la mitad verticalmente para rodear el tronco apoyandolo en el alambre que colocamos para ser la base de este recipiente para que no se mueva, ‘recordando siempre que raiz que se mueve raiz que muere’ponemos el vaso de telgopor sobre el alambre conteniendo el musgo spagnum y rodeando el anillado con barro que hicimos, colocando ambas mitades del vaso la rodeamos de cinta de embalar para que se mantenga firme, podemos ponerle tapa o no, tambien podemos usar otro tipo de recipiente, ocurre que el telgopor mantiene la humedad y es facil de cortar.
Transcurridos unos meses las raíces habrán desarrollado y el acodo puede separarse de la plante madre, se retira el envoltorio igual que con un esqueje enraizado, hay que plantarlo en una maceta de tamaño acorde con el de las raíces y dejarlo en un lugar cálido y protegido.
Acodo terminal Se multiplican acodando yemas terminales enterradas en el suelo. El proceso es igual que el de un acodo simple salvo que en este caso lo que se cubre es precisamente el extremo del tallo, a partir del cual saldrá un nuevo brote con raíz. Éste se separa de la planta madre haciendo un corte y se planta en un sustrato poroso preferentemente.
Acodo de cepellón Se utiliza fundamentalmente con frutales para multiplicar ejemplares que mantengan determinadas características. Se parte de un acodo o esqueje ya arraigado que se planta y poda, dejando un solo tallo de pocos centimetros, en primavera formará brotes que deberán ser colocados en sustrato poroso preferentemente y formaran raíces.