Potus
Epipremnum aureum, de la familia de las aráceas, conocida comúnmente por Potus.
Es una de las plantas de interior favoritas, son muy resistentes y capaces de desarrollarse con facilidad, en casi cualquier sitio en que se las ubique, tanto en el exterior de la casa, en el jardín, como en el interior.
Es una planta tropical, conviene evitar temperaturas muy bajas o muy altas.
Las hojas del potus son perennes, alternas, tienen una forma acorazónada.
Si se las expone al sol se desluce el tono de las hojas una intensidad media hace un efecto de colores ideal en las hojas.
Cabe destacar que, en cierto modo, a los potus les gusta el ambiente húmedo. Para conseguir este ambiente, podemos hacerlo colocando debajo de la maceta un plato con piedras húmedas, jamás en contacto directo con el agua o bien usando un pulverizador sobre las hojas.
En macetas colgantes podrán crecer y desarrollarse con una forma colgante bonita, conviene girar de tanto en tanto la maceta para que vaya desarrollándose de manera pareja y circular. Vamos a notar que acumula el polvo del ambiente sobre las hojas, algo que podemos solucionar de un modo sencillo, con un trapo apenas húmedo limpiar cada hoja con cuidado para que no se quiebren porque son frágiles.
Para reproducirlos por esqueje: cortar unos 15-20 centímetros que mantendremos unos días en agua hasta que broten nuevas raícillas, incluso en tierra húmeda también da resultado, es una planta muy sencilla de reproducir y cuidar, es ideal para comercios y oficinas.