La ética, el Google Maps de nuestra vida.

Ensayo sobre la ética

La ética, palabra muchas veces recurrente como parte de nuestro vocabulario cotidiano va mucho más allá de la simple frase “Qué ética la actitud suya” o “Cuánta ética tiene”, donde ella es sinónimo del buen-acto o una actitud “responsable-digna”.

Cuando se piensa en ética, no caben mayores representaciones que la mencionada anteriormente, pero la realidad es que, en ella, encontramos no solamente más significados o formas de entendimiento de la denominación misma, sino que también es, en si misma, un estilo de vida. Y es que la ética, teniendo en cuenta una de sus formaciones etimológicas, nos lleva a pensar en “cómo queremos ser”, cómo queremos encarar, en base a nuestras propias reglas, nuestra vida y el buen vivir que la ética propone; y dependerá de nosotros qué camino elegir.

Por el mero hecho de ser humanos, la libertad, el razonar, pensar, sentir, etc. son factores que dan lugar a una multiplicidad de decisiones, opiniones, caminos y lugares a los que cada ser humano en particular deberá elegir para saciar su búsqueda de felicidad. La ética y el vivenciar cotidiano están enraizados el uno con el otro, pues gracias a la ética, una persona podrá conducir su vida hacia lo próspero y correcto. Por ello, no hay equivocación al pensar que, si nos comportamos éticamente, somos felices.

Si se piensa aún más allá, la ética no está muy lejos de ser un GPS de nuestra vida, pues gracias a ella y a pesar de muchos obstáculos con los que contemos, sabremos como sobrellevar las situaciones que se nos presenten. Ella nos permite el arte de discernir, en el pleno sentido de la palabra, “distinguir por medio del intelecto una cosa de otra o varias cosas entre ellas. Gracias a ella sabremos dilucidar que es lo bueno, que es lo malo o viceversa.

Tenemos por tanto la tarea de hacer a la ética participe de nuestra vida, y aún si ya lo hacemos, ejercitarla hasta el punto que se convierta en una de nuestras aliadas en nuestro día a día, una de nuestras herramientas más poderosas. Es así y solo así, que conseguiremos llegar a esa tan ansiada felicidad que el ser humano busca todos los días de su vida.